Estilos de bondage.

Hola a tod@s, hoy comentaré un poco sobre los estilos de bondage. Comentaré a grandes rasgos sobre los 2 estilos principales: El occidental o restrictivo y el shibari (oriental).

Estilo occidental o restrictivo.

© Hollyrope.com

Es el más conocido de los estilo ya que básicamente lo podemos ver en todos lados: series de televisión, caricaturas, anime, películas, comics, etc. Consiste básicamente en realizar la restricción del movimiento de la persona atada, va más ligado a la fantasía del secuestro, el rapto, la dominación, humillación, y/o la sensación de indefensión de la parte sumisa al impedir o limitar sus movimientos por medio de las ataduras y situaciones incómodas, que pueden ir desde lo más soft hasta a más hard core, para quedar a merced de la parte dominante. (Un ejemplo muy común es el de atar a la pareja a la cama para hacerle travesuras, uds sabes a qué me refiero jeje).

El término DiD (Damsels in Distress, Damisela en Apuros) suele ser comúnmente utilizado para referirse a este estilo de bondage, siendo también adaptado como Dudes in Distress (Tipos en Apuros) cuando se hace referencia a que la parte sumisa es un hombre.

En ese lado del charco este estilo de bondage es el más comercial, en EU existe toda una industria alrededor del mismo. Así existen productoras de este tipo de material que, valga la redundancia, producen material para venta libre en sus sitios web o material de tipo custom (de forma especial según un cliente especifique y por ende pague por ello). El tipo de material custom no es de venta libre, se produce y entrega solamente para el cliente que lo solicite. Hollyrope.com es un ejemplo de este tipo de productoras y recibe una especial mención por cuenta de este blog por 2 grandes motivos:

1. Esta casa productora es dirigida por un camarada bondagero mexicano, Daniel Xehen, me atrevo a decir que el primer mexicano en lograr establecer una compañía productora de bondage en EU y que además se ha logrado hacer de un lugar en el medio de la industria bondagera.
2. Porque amablemente Hollyrope ha autorizado el mostrar parte del material que produce para ilustrar este blog.

Hay mucha gente que en alguna ocasión ha llegado a fantasear con este estilo de bondage y mientras se respete la regla de oro SSC, a jugar.

En lo personal es el estilo de bondage con el que descubrí mi gusto por las chicas atadas y el que a la fecha más me atrae.

Shibari.

© Juan Pablo Castel

El shibari es de origen japonés. Se le describe como “El arte de las ataduras eróticas”. Es un estilo mucho más elaborado, artístico y tradicionalista, su objetivo, a diferencia del estilo occidental, no es la restricción del movimiento en el sentido de “impedir escapar”, va más bien orientado al intercambio erótico de poder y a la transmisión de sensaciones. En este estilo los amarres suelen ser más eróticos y estimulantes ya que en su elaboración las cuerdas pueden ser utilizadas para pasar por zonas erógenas y causar estímulos.

Como referencia histórica y dato cultural mencionare que el shibari comenzó en el siglo XVI como un arma samurái para capturar, amarrar y torturar prisioneros pero con el paso del tiempo se convirtió en un tipo de erotismo y estética.

En México se cuenta con excelentes exponentes del estilo shibari: Takumi y Shizuko del IMS (Instituto Mexicano del Shibari), Cato Rope, Fanrrin Shibari, Juan Pablo Castel, a quién agradezco enormemente haya compartido una muestra de su trabajo y que haya autorizado el publicarla para ilustrar esta publicación.

En futuras publicaciones se abordará de forma un poco más extensa al shibari y se incluirán algunas entrevistas con estos artistas mexicanos de las cuerdas.

Como verán hay bondage para satisfacer variedad de gustos y sensaciones, mi consejo es que si sienten interés investiguen sobre cómo realizarlo y se animen a probar ambos estilos, seguro que se divertirán y experimentaran diferentes sensaciones y en el mejor (y más deseable) de los casos se identificarán totalmente con alguno de los dos o con ambos. Lo importante es experimentar, divertirse y disfrutar. Platíquenlo con sus parejas y recuerden: “Todo con consenso, nada sin permiso…”

Saludos.